Hace unos días salió publicado en un diario de tirada nacional que el conflicto con Brasil expresa una lucha de intereses que hace que el MERCOSUR sea casi una ficción.
Al leer la nota no pude dejar de pensar respeto a las maneras de presentar los hechos, y de cómo se pueden manipular los datos para justificarlos. Un ejemplo claro: la nota dice que el total del volumen del comercio exterior intra países es insignificante, de apenas el 16%, pero lo que no dice es que nuestros países son todos exportadores a otros mercados de materias primas. Es decir, todos los países MERCOSUR producen más o menos lo mismo y por supuesto que no lo vamos a estar comerciando entre nosotros. La nota también elude el dato de que la Argentina es el primer comprador de productos manufacturados de Brasil, por encima incluso de Estados Unidos.
También se plantea el tema de la incorporación de Venezuela diciendo que es el Congreso Paraguayo el que lleva cinco años sin aprobar el protocolo. Lo que no se dice, es que el comercio con Venezuela se ha intensificado de manera notable, que la Argentina hoy le vende manufacturas industriales en una cifra importantísima comparada con la que había años atrás.
Sí estoy de acuerdo, en cambio, en que al MERCOSUR le faltan un montón de cosas, como el Banco del Sur o la integración energética, pero también es cierto que cuando apareció la idea de los oleoductos, en ese mismo diario se decía que era una locura del Chávez.
Lo cierto es que para llegar a la verdadera integración regional, hay que avanzar en muchísimas cosas que aún están pendientes, ya sea en infraestructura (yo sueño con un ferrocarril que arranque del norte de Sudamérica y llegue hasta la Patagonia para que las mercancías puedan fluir de manera fácil), o en materia energética, poniéndola al servicio del conjunto de la región integrando las capacidades gasíferas y petroleras de nuestros países.
Es decir, faltan muchas cosas, pero también hay que tener en cuenta que este MERCOSUR nació como una integración de las multinacionales, y que poco a poco, en la medida que aparecieron estos gobiernos de otro signo, es que se esta intentando convertirlo en un verdadero proceso de integración regional.