Cuando la muerte nos conmueve y nos interpela, es que estamos ante una pérdida que además del dolor de lo irreparable, promueve desde el espíritu y la razón una trascendencia de sentido. La desaparición de Néstor Kirchner nos insta a que el mayor de los homenajes, en concordancia con su apasionada vida política, sea el compromiso por consolidar y profundizar el rumbo iniciado en el 2003, tanto en el plano nacional e internacional.
Como todo luchador, Kirchner al morir traza una estela de significados para sus militantes y para los compañeros de ruta entre quienes nos identificamos. Esos significados son los la ruptura de las relaciones carnales con el imperio y el paso a una política exterior independiente en la marcha de una integración latinoamericana emancipatoria, son los trazos indelebles de la política de derechos humanos articulada en dos pilares: memoria, verdad y justicia para los crímenes de lesa humanidad y no represión a la protesta social. Son la recuperación de la política como valor colectivo y la interpelación de los poderes concentrados, la recuperación del rol del Estado, como protagonista activo orientando la soberanía económica, la dignificación del empleo, la producción y la redistribución de la riqueza.
Nuestro mayor homenaje será la brega por fortalecer el rumbo iniciado en el 2003, alentando la unidad y diversidad necesaria para ello, y nuestras condolencias con la Presidenta Cristina van hermanadas con el compromiso de apoyarla en su gestión presidencial y en su militancia por la construcción de una Argentina solidaria, equitativa y soberana.
Juan Carlos Junio, Secretario General y Carlos Heller, Presidente – Partido Solidario.