Como su nombre lo indica, la “Ley de Servicios Financieros para el Desarrollo Económico y Social” no es una ley de las Entidades Financieras, sino una ley de servicios orientada a satisfacer las necesidades transaccionales, de ahorro y crédito de todos los habitantes de la Nación.
De esta manera, en el marco de esta nueva ley, definimos a las Entidades Financieras como un Servicio Público, ya que el protagonista es el usuario. Se trata de una ley que define que hay servicios financieros que reciben las empresas, la gente, las comunidades, las regiones, y que esos servicios financieros deben estar orientados al desarrollo económico y social, es aquí desde donde empezamos a articular todo el proyecto.
Los objetivos fundamentales que señalamos en el texto de la ley son los de “promover el acceso universal a los servicios financieros; proveer medios de pago y transaccionales eficientes para facilitar la actividad económica y las necesidades de los usuarios; fortalecer el ahorro nacional mediante productos financieros acordes a las necesidades de los usuarios; proteger los ahorros colocados en las entidades financieras, en particular los correspondientes a los pequeños y medianos ahorristas; impulsar el financiamiento productivo general, en particular de las micro, pequeñas y medianas empresas nacionales; promover el crédito destinado a satisfacer las necesidades de vivienda y consumo de las personas y grupos familiares; alentar una distribución regional equitativa de la actividad financiera; y preservar la estabilidad del sistema financiero”.
Por todo lo anterior, y teniendo al usuario como foco, hemos introducido en la ley una serie de figuras novedosas: una de ellas es la creación, en el ámbito del Banco Central, de la Defensoría de Servicios Bancarios. Este es un punto muy importante, ya que la ley está pensada desde la premisa de que hay un usuario que recibe un servicio y que ese servicio es esencial.
El bloque de Nuevo Encuentro espera que en las próximas semanas se dé un debate amplio y rico que permita a la sociedad saber qué piensa cada uno respecto a qué sistema financiero necesita nuestro país.