No hay que confundir acerca de cuáles son los verdaderos dramas de la Argentina de hoy: no es la falta de dólares para atesorar sino el desempleo, los problemas sanitarios y el hambre, agudizados por la pandemia y la falta de recursos. El gobierno tiene esto bien en claro y sabe por dónde avanzar para dar las mejores respuestas. Eso es justamente lo que irrita a ciertos sectores, que rechazan avanzar en la construcción de un país viable desde el punto de vista económico y social.

Nota publicada en Tiempo Argentino el 04/10/2020