Buenos Aires, 26 de noviembre de 2012.
“Se trata de una avanzada antidemocrática contra trabajadores de prensa, legisladores y funcionarios públicos, motorizada desde un grupo económico al que evidentemente solo le interesa seguir conservando un papel monopólico en el mercado de la comunicación audiovisual”, opinó hoy el diputado Carlos Heller, sobre la denuncia por “incitación a la violencia colectiva” que el Grupo Clarín presentó contra los periodistas Roberto Caballero y Sandra Russo; el relator de fútbol Javier Vicente; el ministro de Justicia Julio Alak; el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini; el titular de la AFSCA, Martín Sabbatella y los legisladores Edgardo Depetri y Juan Cabandié.
“Resulta absurdo que quienes debieran defender a los trabajadores de prensa sean quienes los persigan e intentan llevarlos a la cárcel simplemente por expresar sus opiniones. Esto no es una embestida solamente contra Roberto Caballero, Sandra Russo y Javier Vicente; es un ataque contra la libertad de expresión de todos los trabajadores de prensa”, afirmó Heller. “Esta denuncia va a contramano de la democracia y pone de manifiesto la contradicción flagrante que el Grupo Clarín expresa entre sus declaraciones públicas y sus acciones. Mientras esta gigantesca empresa se ocupó de desplegar una estrategia judicial únicamente enfocada a mantener su posición monopólica, en el Congreso de la Nación se aprobaban normas para garantizar la libertad de expresión y la multiplicidad de voces, como la que derogó la figura de calumnias e injurias y la trascendente Ley de Medios de la democracia”, completó el Presidente del Bloque Frente Nuevo Encuentro en la Cámara de Diputados, bloque que también integran Carlos Raimundi, Juan Carlos Junio y Gastón Harispe.
En cuanto a la denuncia contra Alak, Zannini y Sabbatella, Heller opinó que tienen como objetivo “intentar desprestigiar a funcionarios públicos de trayectoria intachable, que han asumido con un profundo compromiso la tarea de garantizar desde el Estado el cumplimiento pleno de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual”.
“Si con la presentación judicial contra Depetri y Cabandié intentan colocar una mordaza judicial sobre los legisladores, se equivocaron de estrategia. Vamos a salir a denunciar esta maniobra y vamos a seguir defendiendo la Ley de Medios de la democracia, porque la votamos convencidos de que es una herramienta para garantizar la libertad de expresión y terminar con el manejo monopólico de la opinión pública, en un país donde los grupos mediáticos concentrados son verdaderas organizaciones políticas”, completó el diputado.