El estado norteamericano y el tesoro quieren decirle a la población y a los agentes económicos “estos bancos tienen detrás al Gobierno y no van a caer de ninguna manera», por lo tanto van tomando todas las medidas para llegar a eso con la esperanza de que con esas señales alcance y los bancos normalicen su actividad. Es decir puedan retomar lo que tienen que hacer, que es comenzar a prestarle a las empresas y a las personas para que la actividad económica norteamericana deje de caer.
Pienso que el gobierno de Estados Unidos sigue marchando en la idea de que la nacionalización o la estatización parcial siempre será una herramienta temporaria para tratar de amortiguar los efectos de la crisis brutal que el sistema de libre mercado ha generado.
Yo diría que lo que hay que leer entre líneas es que el único capaz de reestablecer la confianza cuando ésta se pierde es el Estado, son los estados. Y entonces los famosos defensores de la libertad de mercado, de la desregulación, de que hay que permitir que el mercado sea el gran regulador, tienen que recurrir a acrecentar el rol del Estado en forma transitoria, tapándose la nariz, cerrando los ojos y haciendo lo que no les gusta, lo dicen en su discurso «no nos gusta esto pero no tenemos más remedio». ¿Por qué quieren hacer esto? porque es necesario transmitir la sensación de que hay fortaleza detrás y que estos bancos de ninguna manera van a caer.