Se está hablando del criterio de nacionalizar la banca en el mundo.
Considero que hay dos formas o dos criterios de nacionalización, uno es el de la convicción sobre el rol del Estado y otro es el de que cuando el sector privado está en crisis hay que acudir al Estado para tratar de parar el pánico y recuperar la cosa.
Desde el inicio de esta crisis se producen escándalos a diario, un claro ejemplo es cuando explota otro fondo que ha prometido rentabilidades fenomenales y que deja absolutamente desairada a la gente que creyó en eso e invirtió. Es allí donde aparece la necesidad de que las Naciones, lo público pongan todo el peso de su patrimonio estatal, de su responsabilidad para tratar de revertir la tendencia y llevarle tranquilidad a los depositantes.
En Estados Unidos uno de los grandes temas que les catapultó la crisis fue cuando la administración de Bush dejó caer al Lehrman Brother. En ciertas palabras cuando cambió la política del salvataje por la política de decir «bueno que se embromen», ahí creo que se generó una desconfianza generalizada en el sistema y el tema escapó del control.
Es real que hay Bancos internacionales con problemas y es por ello que detrás están los estados. Pienso que hay una decisión tomada en el mundo, de que ningún Banco se puede caer y tienen que hacerse cargo, o aparece otro absorbiéndolo o aparece el Estado nacionalizándolo. Este «hacerse cargo» es para tratar de calmar a la gente.